La fatiga, es el cansancio que se presenta después de estar bajo un intenso y continuo esfuerzo físico o mental

¿Alguna vez has sentido, que por más que trabajes y te empeñes en cierta actividad no consigues buenos resultados?, o ¿has padecido una migraña que te ha durado mucho tiempo? o incluso ¿ya no te sientes descansado después de dormir? Todo esto puede ser síntomas de LA FATIGA. Especialmente la que se obtiene durante el horario laboral. Expertos en el tema recomiendan que después de 3 horas de trabajo consecutivo, ya sea físico o mental, es necesario realizar una pausa de al menos 15 minutos. A este tipo de pausas se les denomina “Pausas Activas”.

El objetivo diría, es ayudar mientras se entretiene. Estas pausas se componen de diversas actividades, una de las más comunes es la pausa activa con ejercicios de estiramiento muscular, los cuales permiten oxigenar las articulaciones del cuerpo; e incluso prevenir enfermedades como la Artritis. Además, existen pausas activas con actividades de integración, como por ejemplo ‘las charadas’, este juego impacta positivamente en la salud mental, disminuyendo el estrés, mejorando la atención, y ayudando con la concentración.

Incluso, conociendo el impacto positivo que tienen las pausas activas, muchas personas no las realizan, tomando como excusa cosas como “se me pasó el tiempo”, “me da pereza”, “es que nadie las hace”, entre otras. En GFourmis hemos identificado tres enemigos de las pausas activas: el mal manejo del tiempo, la falta de iniciativa y las preconstrucciones culturales.

“Hacks para vencer los villanos de las pausas activas”

• Con el tiempo tuvimos un gran problema y era que las horas se pasaban y el estrés del trabajo nos dejaba seguir derecho sin parar. Decidimos diseñar un horario el cual respetamos sagradamente. De 9:00am a 9:15am  y de 4:00pm a 4:15pm, tenemos nuestra pausa.

• Con el villano de la iniciativa, creamos una campaña en la cual expusimos la importancia y beneficios que traen las pausa activas, y lo perjudicial que conlleva no realizarlas, además un integrante de nuestro equipo se encargó de recordar los horarios diariamente y de tener diferentes actividades, para así, evitar monotonía y aburrimiento dentro del campo laboral.

• Por último, y más complejo, llega el villano de las preconstrucciones culturales. Lo duro que ha significado para nosotros deconstruir el pensamiento o la cultura de trabajar  7,8 o más horas seguidas sin descansar que tenemos los Colombianos. Con bastante paciencia, y pausas diarias, hemos podido vencerlo poco a poco, porque recuerden: “siempre hay que saber, cuándo parar”.